La Virgen de la Medalla Milagrosa

En esta categoría hemos reunido todos los objetos religiosos dedicados a la Medalla Milagrosa.
La hermosa historia de la Medalla Milagrosa comenzó en 1830, cuando la Santísima Virgen visitó en tres ocasiones a una joven postulante de las Hijas de la Caridad, Sor Catalina Labouré. Esto tuvo lugar en el noviciado de la rue du Bac en París. En la segunda aparición, que tuvo lugar el 27 de noviembre de 1830, la Santísima Virgen le mostró en un cuadro el anverso y el reverso de lo que sería la Medalla Milagrosa. No fue hasta 1832 cuando se acuñaron las primeras medallas; debido a las numerosas curaciones milagrosas obtenidas gracias a esta medalla durante la epidemia de cólera de 1834, la medallita, como se llamó al principio, se extendió como un reguero de pólvora y muy pronto los fieles la llamaron la Medalla Milagrosa. Posteriormente, su difusión no hizo más que aumentar hasta alcanzar miles de millones de medallas distribuidas por todo el mundo. La fiesta litúrgica de la Medalla Milagrosa se celebra en el calendario romano el 27 de noviembre. Esto demuestra la importancia de la Medalla Milagrosa y su popularidad.
Antes de la revelación de la Medalla Milagrosa, en la primera aparición, la Virgen había pedido que se abriera al público la capilla de la Rue du Bac y prometió que se concederían muchas gracias a los fieles que acudieran a rezar al pie del altar de esta capilla. Además, pidió que se colocara una estatua de la Virgen Milagrosa en la capilla, en el mismo lugar donde la Santísima Virgen se había aparecido a Santa Catalina Labouré. No fue hasta la muerte del santo que se cumplieron las dos peticiones de la Virgen María en 1880.
La estatua de la Virgen María en la capilla es ligeramente diferente a la de la medalla. En esta última, la Santísima Virgen tiene los brazos abiertos y las manos extendidas hacia abajo, mientras que la otra estatua, la que se colocó en la capilla, representa a la Santísima Virgen llevando un globo terráqueo en las manos a la altura del estómago. En cualquier caso, la Virgen María es honrada por ambas estatuas.
La inscripción de la medalla, "Oh María sin pecado, ruega por nosotros que recurrimos a ti", deja claro que la estatua de la Medalla Milagrosa es una estatua de la Inmaculada Concepción, pero es más que eso. Parte del simbolismo de la Medalla Milagrosa recuerda el privilegio de María Mediadora de todas las gracias (los rayos luminosos) y el título de María Corredentora (la cruz y los dos corazones en el reverso de la medalla).
Estas pocas explicaciones muestran la riqueza teológica y espiritual de la Medalla Milagrosa. Está claro que la devoción a la Virgen de la Rue du Bac no se limita a este objeto religioso que se lleva al cuello, sino que también incluye estatuas, llaveros, iconos, etc.
Para saber más sobre la Medalla Milagrosa, le invitamos a leer las descripciones de los objetos religiosos dedicados a la Medalla Milagrosa. En cada uno de ellos encontrará consideraciones teológicas, espirituales e históricas.